Aunque he visto la película
como mera espectadora, no he podido evitar meterme dentro de ella como si fuera
una más del guión.
Los sueños son
maravillosos sin lugar a dudas, los anhelos, los deseos, todo cabe en la mente
del ser humano y más cuando una sabe la capacidad que se tiene. Pero de ahí a
dejar la felicidad en manos de otro ser humano, pues como qué siempre pasa factura.
O al menos eso pienso yo. Ángel es una muchacha que ama a su esposo, pero este
no solo no la corresponde sino que se aprovecha de ella. Ella sigue viviendo en
su mundo de fantasía creyendo en el amor para siempre y eso hace que enferme matándola
de dolor. Lastima de vida y de una posible buena escritora. El amor es un
estado de la conciencia y con eso no digo que yo no ame, amo y mucho, pero no
dejo de reconocer los pros y los contras no viviendo en una nueve de mentira ni
engaños. La vida tiene que ser de color porque para que te ennegrezcan los
colores, ya se encarga la propia vida de ello. Podría decir muchas
más cosas de esta película, pero creo que es mejor que la veáis y juzguéis
vosotros mismos.
Ángel (Romola Garay) es
hija de una dueña de un almacén de abarrotes de un barrio, desde ahí mira con
envidia la mansión Paradise, la sueña y en sus escritos comienza a dar rienda a
sus fantasías... ella siente el talento que le brota por el cuerpo... sabe que
tiene pasta, a lo mejor no entiende por qué es ella, de hecho en su colegio
creen que le copia a otros escritores sus trabajos, pero ella con una sóla meta
en su frente, ha decidido enviar una novela a una editora de Londres... como
sabemos si algo resulta... y así es como la llama Theo (Sam Neill) para que
vaya a Londres a conversar sobre la posible publicación de su novela
Así Ángel Deverell se
hace famosa con su primera novela, no conociendo muchas cosas de la realidad,
como creer que una botella de champagne se abre con un sacacorchos. A ella eso
no le importa, da lo mismo... su obra
comenzó a ser leída y querida por la gente, aunque no mucho por los
intelectuales, pero eso que importa...
a pesar
de que Hermione (Charlotte Rampling) conoce y detesta las limitaciones de
talento de la nueva escritora, pero en fin... ella ya es famosa y está
comenzando a cumplir sus sueños, ha comprado la mansión que siempre quiso,
ahora su madre vive con ella y con ayuda de su principal admiradora Nora (Lucy
Russell) Esta le ayuda a construir su imperio.
En una presentación de uno
de sus libros conoce a Esme (Michael Fassbender) hermano de Nora, hay una
envidia entre los hermanos y en cierto sentido un amor por el que se compite...el
de Ángel. Pero la máquina de hacer dinero que la inspiración le da a Ángel no
es una fuente eterna y el desgaste empieza a ser notorio. Todos notan que la
situación no da para más... pero Ángel no es consciente de dicho declive y
persiste en seguir con un estilo de vida que casi no le corresponde... por un
lado no le importa mucho que se sepa su origen pobre y por otro, no está
dispuesta a volver a ese mundo del que venía.... podemos llegar a niveles
irreales de vida cuando confundimos los sueños con las obsesiones... Ángel tuvo
su momento que supo aprovechar, pero este no es eterno y sigue viviendo entre
la irrealidad y la fantasía, el amor y el desamor del silencio y la mentira y todo
se desmorona como un castillo de naipes.